- Venía a poner una reclamación.
- ¿Una reclamación contra quién?
- Contra ustedes.
- Tome una hojade reclamación y escriba.
- Te la dicto y la escribes tú, que pa´eso estás.
(Os podéis esperar la cara del funcionario, a estas alturas)
La queja fue la siguiente:
- El otro día un chaval le robó el bolso a mi amiga "Puri", y vosotros no estabáis ahí, pero en cambio para poner multas a personas buenas sí. ¡No tengo más que decir, sinvergüenzas!
Cogió la puerta y se marchó. Tan digna como divertida, consiguió que arrancara una sonrisa hasta el más amargado del respetable cuerpo de seguridad. (A veces irónico)
1 comentario:
Aqui tambien
Publicar un comentario